Vuelve Laurentino Vélez a las páginas de Bearn Black, en esta ocasión para hablarnos del Noir Político…
La novela «Noir» ha sido a menudo una lúcida narradora de las situaciones de anormalidad política, ilustrando sobre todo un mundo asolado por los totalitarismos, el afán de poder y las peores expresiones de la bajeza humana. Los autores argentinos tienen el mérito, pero también el triste privilegio, de haberse erigido en los que mejor han sabido darle traducción ficcional al fenómeno de la Razón de Estado y sus entresijos. Esto como testigos de la particular y dramática experiencia colectiva vivida por los países del cono sur, de la que la dictadura de Videla fue la máxima manifestación en el escenario internacional de la Guerra Fría. Primer Premio Cosecha Roja, la obra de Fabio Nahuel Lezcano, Crímenes apropiados, ( JPM Ediciones, 2015), es un buen ejemplo de la singular novela negra que ha ido proliferando en aquel país, combinando el «Noir», el género policial,el político e incluso el histórico.
A mediados de los ochenta y en medio de la Argentina «Alfonsina» de la transición a la democracia, un senador es brutalmente asesinado por un sicario. Sobre la víctima pesa la sospecha del tráfico ilegal de armas. Un periodista en dificultades intenta investigar el caso. Sin embargo, empieza a recibir presiones de un magnate de la prensa, dueño de un importante medio de comunicación y caracterizado por oscuros vínculos con la Junta Militar en los últimos momentos de la dictadura. El empresario se ha caracterizado de hecho por un férreo control de los redactores de su periódico, introduciendo a comisarios políticos y chivatos en el seno de la redacción. Oportunista y acomodadizo respecto a la nueva coyuntura de la Argentina democrática, el magnate guarda un oscuro secreto : la adopción de dos hijos varones en condiciones ilegales y arrancados a sus verdaderos padres durante los peores años de la «Guerra Sucia» y la lucha contra la «subversión», que estaba en todo el delirante imaginario anti-comunista de la Junta Militar.
Educados bajo la tutoría e instrucción de un coronel, los hijos del magnate crecen en la mentalidad de la «Guerra Sucia», convirtiéndose con los años en dos sicarios a las ordenes de todos los grandes intereses vinculados a la dictadura. El arte del crimen se ha convertido en el principio rector de sus vidas. Ignorantes de sus verdaderos orígenes, con el tiempo uno de los dos hermanos se va dando cuenta de que no ha sido otra cosa que el instrumento de su padre adoptivo. En el tiempo de las «Abuelas de la Plaza de Mayo», de la reclamación de los niños desaparecidos y del juicio a los miembros de la Junta Militar, comprende que toda su existencia es una mentira construida pieza a pieza. A partir de ahí, no solo empezará a reflexionar sobre su propia actitud y los crímenes que ha cometido, sino también acerca de su identidad personal. Descubrir las falsedades de su padre adoptivo le lleva a sentirse como un ser sin pasado y lleno de rencor y odio hacia su supuesto benefactor. Necesita saber quiénes son padres en realidad y dónde están sus orígenes. Recurrirá a la ayuda del mencionado periodista, que está intentando desenmascarar al gran magnate. Sin embargo, esa búsqueda de sí mismo tras comprender que no han sido otra cosa que un individuo adoctrinado en la maldad de la dictadura y sus cómplices, no va a ser evidente. Él y el periodista encontrarán miles de obstáculos que reflejarán, no solo los vínculos entre los poderes fácticos, la prensa y la dictadura, sino también la complicidad, voluntaria o involuntaria, de muchos miembros de la propia sociedad civil durante los años de la «Guerra Sucia» .
Fabio Nahuel Lezcano construye un personaje que se aleja por completo de la figura del serial killer, siempre amorfo, frío, sin alma y plegado a las reglas del crimen gratuito. Muy por lo contrario, lo dota de conciencia, demostrando que la maldad nunca puede ser absoluta, sobre todo cuando los individuos son capaces de reflexionar sobre sí mismos y el sentido o no de sus actos. También ilustra la trascendencia de los vínculos de parentesco y filiación en la constitución de la subjetividad y la identidad personal, así como el dolor moral que supone el engaño y la pérdida de referencias en nuestra historia de vida. Pero sobre todo y ante todo, la obra de Fabio Nahuel Lezcano es un testimonio de la etapa más oscura y trágica de la historia política y social argentina, así como sobre la impunidad de los crímenes de Estado y de quienes se alzaron en sus artífices. Obra magnifica y muy recomendable, nos vuelve a recordar las enormes potencialidades del «Noir» como instrumento literario de crítica social y denuncia de los grandes males de nuestro tiempo.
LAURENTINO VÉLEZ-PELLIGRINI
Crímenes apropiados
Fabia Nahuel Lezcano
JpM Editores
2015.